lunes, 9 de mayo de 2016

La felicidad, la practicidad y los bienes raíces. 1 de muchos


Consejos de una persona desordenada y dispersa para aumentar el valor de tu propiedad.
Por Diamela Atencio Facebook  Instagram
Toda mi vida he sido desordenada, siempre parecía como si una juguetería, una boutique y una
oficina hubiesen explotado en mi habitación, era demasiado; demasiados recuerdos, juguetes, ropa, actividades combinados con mi flojera interminable y lo dispersa que mi mente siempre ha estado.

Con el tiempo y la convivencia con otros, la madurez, las prioridades y el haberme casado con una persona muy ordenada y metódica me ha tocado cambiar la manera de manejar lo que tengo y la manera de mirar las cosas.

Aun pierdo las llaves y el teléfono no menos de 2 veces al día y entre las muchas cosas que hacer tengo algunos proyectos a medio hacer, pero he desarrollado ideas para mantener todo lo más ordenado posible con el mas mínimo esfuerzo.

La experiencia de ser un agente de bienes raíces combinada con lo que siento cada vez que le digo a mis clientes que si su casa no luce como de revista no les van a pagar lo que quieren por ella y no se va vender rápido me ha llevado a ser más consciente de mi propio entorno.

Un cambio a la vez. Si, Solo uno

Decidí hacer un cambio a la vez para hacer las cosas más prácticas de una vez por todas, un cambio significativo para hacer mi vida más fácil. Cada mes una sola cosa que mejora, me ahorra tiempo y me hace mas organizada. Con perseverancia quizás al final de esto les escribo un libro.

Capitulo primero: La explosión de pantaletas y otros artículos de ropa interior

Paso uno: sacar la gaveta y ponerlo todo en la cama.
Paso dos: Todo lo que no me queda se va –Si no he rebajado hasta ahora ¿A quien engaño? – Además si rebajo mi premio será comprar cosas nuevas que hagan honor a mi nueva figura. #HeDicho.

Todo lo que no me hace ver bien y sentir feliz se va también, no importa si me quedo con dos o tres nada más        
Paso tres: Buscar un archivo tipo acordeón que sea de la misma altura o un poco más bajo y pego con silicón los extremos del archivo a los extremos de la gaveta.   

Paso cuatro: Separar por tipos
Paso cinco: doblar y hacer rollitos e ir acomodando en el acordeón uno al lado del otro de manera que los puedo ver todos y si agarro uno no se mueven los otros.

Listo!
PS: Después que hice una gaveta aplique lo mismo para las franelas y tops del gimnasio y a un lado le acomode sostenes y medias usando cajas de zapatos como separadores. Todo junto pero no revuelto y si saco una cosa no se desordena todo ni se vienen diez.










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